Emprender es ser original
Ser emprendedor es una tarea difícil y dura. Las cosas no llegan solas. Se requiere esfuerzo y tesón. Hace unos días insistía en el hecho de que emprender es algo más que buscar el autoempleo. Por eso, una de las cualidades que más valoro en el emprendedor es la originalidad.
Como notario, tengo la suerte de conocer, de primera mano, cómo empieza su viaje el emprendedor. Siempre me ha gustado preguntar, con ocasión de la constitución de sociedades, a qué actividad se va a dedicar la sociedad que ayudo a nacer.
Tras las enumeraciones abstractas que encierran el objeto social siempre existe una actividad concreta que los fundadores, sean o no emprendedores, se proponen desarrollar inicialmente. Para mis adentros, valoro la respuesta que se me da. En ocasiones me congratulo, sorprendido, ante una buena idea y felicito a aquellas personas que comparten conmigo ese momento tan importante en sus vidas. En ese instante soy consciente de si esas personas son auténticos emprendedores o si, por el contrario, tratan de fundar un negocio o, simplemente, generar autoempleo, lo cual, pese a la bondad de los propósitos, no es equivalente.
Se puede ganar dinero de las dos formas, pero sólo es emprendedor el que fundamenta su proyecto en la originalidad y creatividad, buscando materializar su sueño e idea en un proyecto concreto.
Un ejemplo de lo que relato se encuentra en las tiendas de cigarrillos electrónicos; hace ya ¿un par de años? aparecieron las primeras tiendas, realmente eran establecimientos novedosos, vendían un producto poco conocido. Al poco tiempo empezaron a proliferar comercios de ese tipo, fueron tantas las aperturas como los cierres consecutivos.
El emprendedor, probablemente, ganó dinero, si tuvo vista, vendió el negocio en un momento oportuno. Ahora, ese emprendedor estará soñando su nuevo proyecto. El que no era emprendedor, no vendió el negocio, ahora es empresario o persona que se autoemplea, aprieta los dientes y espera que las cosas cambien.
Y es que, el elemento diferenciador del emprendedor radica en el hecho de ser original.
Buen impulso al emprendimiento desde la diferenciaciON, compañero!
Suscribo 100% todo ese «esqueleto» de cONciencia emprendedora. Todo ha de tener una estrategia que, en mi particular visión, ha de estar dispuesta a evolucionar y al aprendizaje cONstante en colaboraciON con nuestros segmentos sectoriales de la forma más desinteresada posible porque el retorno es inmenso y muy satisfactorio. Sin embargo, cada idea, cada proyecto, cada negocio, cada aportacion debe tener una esencia.
Quizás en ocasiones se esté haciendo el proceso inverso. En las posibilidades de mentorización procuramos trabajar como prioridad la interiorización no sólo de objetivos económicos, estructurales y legales, sino de marca personal o empresarial. Es el ALMA con mayúsculas de cada profesional o emprende que le pondrá en #acciON cuando cada mañana levante su persiana real o virtual. Es el elemento diferenciador que, por encima de similitudes, sitúa a cada proyecto en una posición definida cuya estabilidad dependerá de la concreta gestión.
En la gestión hay mucho más de que hablar que podría resumirse en «El que tiene tienda que la atienda» (siempre jugando con el lenguaje, aquí, tu amiga… ), sin embargo, si persiste el ALMA en similitud con los objetivos y bien aderezada de una buena dosis diaria de perseverancia y mucho #modoON, el elemento diferenciador queda potenciado por encima de todo.
#ImpulsoEmprendedor evidenciando el elemento diferenciador. Buena aportaciÓN!!
Gracias por tus palabras, querida amiga.
Me animó a escribir el post el hecho de que es necesario dar valor añadido a lo que uno hace. Es algo que no siempre se observa, ahí radica la diferencia entre hacer o copiar; o, entre hacer y mejorar.
En la época actual, como consecuencia de los nuevos modos, redes sociales y las nuevas leyes, muchas personas han tratado de sustituir el término «empresario» por el de emprendedo; desconociendo que, si bien, pueden tener lugares comunes o intersecciONes no sON términos intercambiables.
En una época en la que todo se comparte y es tan fácil copiar como difícil controlar la copia, la originalidad debe ser lo que marque, como bien dices, el ALMA de tu proyecto, ahí radica el branding.
Me ha gustado la llamada que haces a la idea de cooperación generosa y retorno incalculable.
Siempre cONectados! Feliz día.